Al reconocer el Día Nacional de Concienciación sobre el SIDA Latinx el 15 de octubre, es vital reflexionar sobre el impacto del VIH/SIDA en la comunidad Latinx y llamar la atención pública sobre las necesidades de quienes están afectados. A pesar de los avances que hemos logrado en la lucha contra esta epidemia en las últimas cuatro décadas, debemos mantenernos vigilantes. Nuestras comunidades latinas siguen enfrentando desafíos alarmantes, y es nuestra responsabilidad colectiva garantizar que tengan acceso a recursos esenciales para la prevención, tratamiento y atención del VIH.
Datos recientes de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) revelan una tendencia preocupante: mientras que las tasas de nuevas infecciones por VIH entre grupos raciales y étnicos no hispanos disminuyeron en 2022 en comparación con los niveles previos a la pandemia en 2018, las nuevas infecciones entre latinos aumentaron un 17%, con hombres latinos que tienen sexo con hombres (HSH) experimentando un aumento asombroso del 22%. Por primera vez desde que comenzó la epidemia, los HSH latinos tienen ahora las tasas más altas de nuevas infecciones por VIH en el país. En Nueva York, las disparidades son aún más pronunciadas, con diagnósticos nuevos de VIH entre individuos hispanos siendo 4.8 veces más altos que los de individuos blancos no hispanos en 2022.
Esta dura realidad exige nuestra atención y acción. La Oficina de Política Nacional del SIDA de la Casa Blanca (ONAP), bajo el liderazgo de Francisco Ruiz, organizó recientemente la Cumbre Adelante!: Una Convocatoria de la Casa Blanca para Acelerar la Respuesta de Nuestra Nación al VIH en Comunidades Hispano/Latinas. Cientos de líderes y activistas Latinx se reunieron, tanto en persona como virtualmente, para reorientar y planificar cómo alcanzar nuestro objetivo nacional de poner fin a la epidemia del VIH para 2030.
Sin embargo, no podemos ignorar el estigma duradero, los factores sociales, económicos y sistémicos que agravan el VIH/SIDA, así como las inequidades de salud más amplias en nuestras comunidades. Los datos son inquietantes: las nuevas infecciones por VIH entre mujeres transgénero latinas aumentaron un asombroso 94% entre 2014 y 2022, mientras que las infecciones entre hombres latinos jóvenes de 25 a 34 años aumentaron un 95% en la última década. Según la Oficina de Salud de Minorías del Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE. UU., las mujeres hispanas tenían 19 veces más probabilidades de tener SIDA en 2022 en comparación con sus contrapartes blancas no hispanas, mientras que los hombres hispanos enfrentaron casi el doble de la tasa de mortalidad por VIH.
Un factor que contribuye a este resultado es la falta de acceso a profilaxis previa a la exposición (PrEP) para las personas latinas. Según datos preliminares publicados por el CDC en octubre de 2023, sólo el 24% de las personas latinas que podrían beneficiarse de PrEP han sido prescritas, en comparación con el 94% de las personas blancas que podrían beneficiarse de PrEP.
El acceso a la educación, las viviendas, el seguro de salud y los servicios de atención médica son componentes críticos para las pruebas, la prevención y el tratamiento. Medicaid y el Programa de VIH/SIDA Ryan White desempeñan roles significativos en la provisión de atención ambulatoria y servicios de apoyo para personas que viven con VIH. Los Planes de Salud de Necesidades Especiales de Medicaid de Nueva York, como Amida Care, están diseñados específicamente para apoyar a quienes están afectados por el VIH, y Amida Care ofrece experiencia en atención afirmativa de género para individuos transgénero, independientemente de su estado de VIH.
Amida Care trabaja incansablemente para facilitar el acceso a atención médica integral y culturalmente sensible, para que sus miembros puedan llevar vidas saludables y plenas. Como miembro de su Junta Directiva y Presidente de la Comisión Latina sobre el SIDA, estoy comprometido a colaborar con proveedores de atención médica, socios comunitarios y organizaciones de servicios sociales para dirigir atención al impacto desproporcionado del VIH en la comunidad latina. Se requiere un esfuerzo unido para lograr nuestro objetivo de erradicar el VIH, y necesitamos mantenernos comprometidos y proactivos.
Debemos cultivar una nueva generación de líderes que puedan mantener la atención sobre esta epidemia y promover la inversión en campañas educativas cultural y lingüísticamente adaptadas, programas de prevención y tratamiento, investigación, iniciativas de desarrollo de fuerza laboral, asociaciones multisectoriales y acceso a atención médica de calidad. Además, debemos desmantelar las barreras culturales, igual como la homofobia, transfobia, y xenofobia que dificultan el compromiso a las comunidades desproporcionadamente afectadas. Erradicar el VIH requiere nuestra fuerza colectiva como comunidad, y juntos podemos crear un futuro donde cada individuo esté informado, empoderado y libre de la amenaza del VIH. ¡Juntos podemos!
Fuente: Este artículo de opinión fue escrito por Guillermo Chacón, presidente de la Comisión Latina Sobre el SIDA y publicada en https://eldiariony.com/